Tras haber puesto los ojos en Brasil
durante el Mundial de Futbol este año, ahora se vislumbra otro panorama
no tan agradable en Rio de Janeiro, lugar donde se espera se lleven a
cabo los Juegos Olímpicos con el mismo nombre en 2016.
Aunque aún faltan dos años para dicha
competencia, los trabajos a marchas forzadas para quedar listas las
instalaciones que albergarán la justa veraniega preocupan a Jhon Coates,
Vicepresidente del Comité Olímpico Internacional (COI) ya que solo
lleva de avance únicamente el 10 porciento.
En dicha revisión fue ampliamente
criticado este país mundialista, pues es notable el gran atraso en los
trabajos de construcción, ya que se ha tomado la decisión de laborar con
premura para dar lugar a dicho evento del 5 al 21 de Agosto de ese año,
lo que costará la cantidad de 17 millones de dólares previstos por las
autoridades, y a su vez, ante cualquier contratiempo, se han tenido que
contemplar medidas extremas como un segundo escenario para dicho evento,
el cual no está declarado actualmente.
Una de las obras que llaman mucho la
atención en dicha preocupación es la construcción del Parque Olímpico
Deodoro, pues es la sede con mayor numero de disciplinas a realizar en
dicha instalación, tales como: equitación, ciclismo (de montaña y BMX),
tiro, esgrima y hockey sobre césped.
El panorama no es nada alentador para la
infraestructura deportiva pues otra de las instalaciones está en Bahía
de Guanabara, donde se realizarán las competencias de vela y
windsurfing, esta se encuentra en total abandono, llena de basura. Se
prevén 37 lugares disponibles para el acontecimiento de las cuales ocho
serán temporales.
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff,
aseguró que los Juegos Olímpicos Rio 2016 serán prioridad hasta su fin,
ya que este suceso fue catalogado como el “Peor retraso de los Juegos
Olímpicos jamás visto, incluso peor que Atenas 2004”.
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