La
cinta que muchos consideran como el regreso triunfal de Michael Keaton a
la pantalla grande, fue la película elegida para inaugurar la edición
71 de la Muestra Internacional de Cine de Venecia.
Birdman,
de Alejandro González Iñarritu, es una comedia con una pizca de sátira,
filmada en su mayor parte en largos planos secuencia y con un argumento
lineal – algo con lo que el director mexicano no tiene acostumbrado
trabajar – con la participación de Michael Keaton interpretando a un
actor maduro que busca reencauzar su carrera, tras la fama que le dejo
años atrás el interpretar en el cine al superhéroe del título.
Acompañan
a Keaton, Edward Norton, Emma Stone, Naomi Watts, Andrea Riseboroug y
Zach Galifianakis, y tiene tras la cámara a Emmanuel Lubeski, quien
viene de ganar un Oscar por su trabajo con Cuarón en Gravity.
La
audiencia y la crítica aplaudieron la cinta tras su proyección y
reconocieron el trabajo de Keaton y González Iñarritu, en una película
donde existe una línea muy delgada entre la ficción y la realidad; entre
la carrera de este personaje y la de Michael Keaton.
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